¿Cuánto tiempo has tenido apartado este recurso? ¿Te has preguntado por qué? al no ser algo que se pueda tapar, guardar en una bolsa o comprar es como si no tuviera valor o quizás las connotaciones “mágicas” o “raras” otorgadas a la intuición la han relegado al cuarto oscuro, mira las fotos… ¿que te sugieren?
quizás la intuición está allí pero no la veas… o quizas si la ves…
Pero acércate, confiésalo, que estamos aquí solos tu y yo… ¿alguna vez has hecho caso de ella? ¿Alguna vez no has asistido a una cita solo porque había una unión entre tu cabeza y tus vísceras que te decía que no? O quizás llegas a dar tu clase y decides “cambiar algo… “ de lo que llevabas programado… ¿O en contra de todo pronóstico favorable, decidiste embarcarte en aquel proyecto que al día de hoy solo te ha dado alegrías?
Y ya que estamos aquí solos tu y yo, mi secreto confesable es que hago caso a las punzadas en mi cabeza, corazón y estómago, ( sí, todo junto) es lo que para mí es la intuición o eso me enseñó mi padre, así que no era diferente a ti y si a esto sumas los libros de psicología metidos en la cabeza, la corriente conductista marca de la casa de la facultad donde me gradué y mis profesoras/mentoras ( a las que admiro con locura) muchas de ellas terapeutas de la Gestalt, era un cóctel un poco “raro” -para variar- Así me dije: “es lo que hay”… y ya perdí la cuenta de los años que hace que utilizo mi intuición como una herramienta más en mi vida diaria. A mi particularmente me resulta, – comprobación empírica basada en mi experiencia claro…- tanto, que la he acabado normalizando. Todos tenemos la capacidad para escucharnos muy, muy internamente, yo lo veo como algo que traemos de serie, de fabricación y siento que a medida que nos hacemos adultos y dejamos de “soñar despiertos” como lo hacen los niños, ponemos la intuición en el cajón del “caca”, del “eso no se toca” o de las “cosas prohibidas”. De paso está decir que en este cajón también está metido el “sexo”, “la muerte” y, porque no, hasta el Rock and Roll…
Cuál fue mi sorpresa, grata por supuesto, ya que mi hipótesis de que la intuición es útil comenzaba a iluminarse al oír al amigo Eduard Punset hablar de ella en una entrevista y, mejor aún, presentar un libro, “el sueño de Alicia”, donde aglutina investigaciones e ideas en forma de novela otorgando relevancia científica a la “intuición”, como podéis imaginar ¿cerebro e intuición? Era para mí como oír pan y chocolate Verano y sol… una combinación explosiva.
Yo ya me he confesado, y me encanta… antes de acabar las fotos son de Marcos Pérez búscalo en instagram @perezmtr
Te invito a que veas el vídeo, y me cuentes que te parece, ya sabes que tu opinión para mí eso es un tesoro